martes, 14 de mayo de 2013

¡POR FIN A SECA!

Con la  ilusión de poder pescar a seca me acequé al río. Mayo suele ser un punto de inflexión para los pescadores de mosca. Las aguas frías van remitiendo, las eclosiones de insectos aumentan y las truchas salen de sus huecos para comer en superficie. Pescar a ninfa o con un tándem está bien, pero pescar a seca en medio de una eclosión para mi sigue siendo el momento más especial de la pesca con mosca.
Soleado, temperatura agradable y sobre todo viento suave, detalle fundamental en algunos ríos para poder colocar la mosca con precisión, eran buenos augurios.

Con los aperos montados y vadeador en ristre bajé al río esperando ver a las truchas cebándose, pero una cosa es el deseo del pescador y otra la realidad. Bajaban algunas olivas de vez en cuando, se veían tricópteros y dípteros volando, pero ausencia total de cebadas. Con este panorama, viendo los buenos resultados que últimamente me estaba dando el tándem, até al bajo un Barón rojo y una ninfa de faisán de las que ya he puesto fotos en entradas anteriores.








De esta forma fui clavando truchas, la mayoría pequeñas,  pero con una librea preciosa, con intesos puntos rojos y aletas anaranjadas. A diferencia de otras jornadas esta vez el Barón daba algunas capturas, signo de que las truchas ya estaban acostrumbradas a comer arriba y además ya se podían ver algunas cebadas, aunque muy esporádicas.
Con el transcurrir del día la actividad en superficie aumentó y a pesar de que el tándem funcionaba perfectamente pude pescar a seca. Una truchita aquí, otra un poco más arriba cebándose, en aquel pozo vuelvo a poner el tándem a ver si pesco una grandecita...


Así fue trascurriendo la tarde hasta que el ocaso y el casancio dijeron que era hora de irse para casa. Ya en el coche algunos recuerdos de la jornada se me venían a la cabeza, como queriendo permanecer para siempre en mi memoria.

9 comentarios:

  1. Muy bien Sergio! Deseando estoy yo también de que entren como es debido a la seca, que estoy de la ninfa hasta las narices jejeje

    Por cierto, que pinta más buena tiene ese río, supongo que cuando salgan ignitas tiene que ser la caña pescar ahí.

    Un abrazo

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    1. Alfonso este río es brutal en cuanto a número de truchas y no hace falta que salgan ignitas. Comen arriba con pardones, rhodanis, leptoflebidos, siálidos... a poco que la eclosión acompañe. Estoy contentísimo porque con la sequía del año pasado y la sangría que hacen al río con los riegos pensaba que este año la cosa estaría bastante chunga, sin embargo las truchas han mantenido el tipo, quizá haya disminuido un poco la talla, pero ese es un mal menor, ya crecerán.
      Saludos

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  2. Me alegro mucho Sergio que hayas pasado una buena jornada espero que haya muchas mas y mejores un saludo

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    1. Haberlas, haylas Pichi. Las grandotas no han dado la cara, pero tiempo al tiempo.
      Saludos

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  3. Me alegra que hayas disfrutado y sobre todo saber que que sigen estando a pesar de todo y cebandose como siempre que no es poco, pues todavia aparte de dos sitios contandos no han empezado a comer arriba, pese a la fecha que estamos, venga un saludo.

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    1. Sabes de sobra Miguel lo que sufrio este río el año pasado y sin embargo las truchas están ahí, parece increible. Pescar a seca es un privilegio que nos concede este río un poquito antes que los demás y hay que aprovecharlo.
      Saludos

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  4. Como me alegra leer esta entrada de verdad. Nosotros hemos ido un par de veces y alguna hemos sacado a seca pero no estaban muy por la labor, a ver estas semanas venideras que nos deparan,

    saludos!

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    1. Comparto la alegría Mario. El río está poco a poco mejorando en todos los sentidos, a aprovecharlo y a cuidarlo entre todos porque tenemos un joya.

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    2. Este río no se merece otra cosa Sergio

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